¿Quieres mantener en buen estado alimentos como las verduras, la fruta o el pescado? Toma nota de los siguientes consejos y te durarán mucho más.
1. La fruta de temporada se estropea menos
Guárdala fuera, en un lugar fresco donde no haya humedad. Si es del tiempo se estropea menos. Para que dure más, ponla en la nevera envuelta en un paño húmedo. El plátano, la piña y el kiwi se conservan mejor fuera del frigorífico. El último a temperatura muy baja se vuelve ácido.
2. No congeles alimentos calientes
Si lo haces forzarás el motor de tu nevera y gastarás más luz.
3. Las patatas, a temperatura ambiente
Mantén las patatas – conoce aquí 10 beneficios de la patata – en un lugar ventilado y oscuro. Si tienes muchas, ponlas en una caja de cartón con papel de periódico o en un saco opaco. Cuando estén arrugadas, mételas en agua fría y llévalas a la nevera para que se endurezcan. Jamás las juntes con cebollas o ajos porque absorben su humedad y lo estropean todo.
4. Verduras y hortalizas, con un poco de frío
Ambas se conservan hasta dos semanas en la nevera, protegidas con un paño de algodón (sobre todo las de hoja). Las alcachofas no aguantan más de tres días fuera de la nevera, mientras que en agua lo hacen durante siete. Las espinacas en un tuper hermético bien lavadas y secas, pueden durar incluso varias semanas. Por su parte, la lechuga se mantiene mejor si se guarda sin lavar, con las hojas separadas dentro de un tuper con legumbres secas.
5. Cebollas, dentro y fuera de la nevera o en el congelador
En la nevera, la cebolla aguanta más tiempo aunque se endurece un poco. Si está troceada ponle encima un trapo de cocina húmedo para que no se seque. Si la vas a cocinar y te sobra una poca, ralla y congela para el próximo día. Lo mismo puedes hacer con el perejil.
6. Legumbres secas, en la despensa por no más de un año
Puedes guardar las legumbres (lentejas, garbanzos, alubias secas…) en un lugar seco y sin luz como puede ser la despensa, pero nunca lo hagas por un tiempo mayor a un año. También puedes almacenarlas congeladas en bolsas de plástico.
7. Pescado y carne en la zona más fría de la nevera
Mantén ambos alimentos en la zona más cercana al congelador. La carne en un recipiente con rejilla y tapada con film. La picada se ha de consumir lo antes posible, si está entera a lo largo de cuatro o cinco días. El pescado por su parte, envuelto en papel vegetal ya limpio, en una bolsa, es capaz de aguantar hasta tres días.
8. El arroz y la pasta…
Aguantan hasta tres meses en una zona seca y oscura, en recipientes de cristal y herméticos. Ya cocido, el arroz puede aguantar hasta 4 días si se rocía en él un poco de aceite para que no quede compacto.
9. Quesos y embutidos
Coloca este tipo de alimentos en los estantes centrales o superiores de tu frigorífico. Envuelve el queso con un trapo para evitar que absorba olores de otros alimentos y procura no usar papel de aluminio ni film porque favorece la aparición de moho. Lo ideal es utilizar fiambreras no herméticas para él, mientras que el embutido es recomendable que se mantenga cerrado herméticamente.
10. La comida cocinada, al margen de los alimentos frescos
Tapa bien los alimentos cocinados. Cuanto más llenos, menos aire y riesgo de oxidación habrá.
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