Los huevos fritos son un plato muy común, de fácil digestión y rico en proteínas. Por esta razón es el complemento principal de múltiples platos.
Pocos los relacionan con la comida sana, pero lo cierto es que pueden cocinarse de muchas formas como con poco aceite y escasa sal (estrellados), y es de hecho conveniente dado que los huevos fritos no son malos para nuestra salud (ni nuestra dieta), siempre y cuando no lo acompañemos de frituras.
Evidentemente, si lo comemos acompañado de patatas fritas estaremos aportando a nuestro organismo grasas no saludables, consumiendo más calorías y grasas de la cuenta.
Como os decía, hay varias recetas sanas que incluyen este alimento, es más, muchos médicos lo recomiendan en el desayuno, incluso para adelgazar, ya que ayudan a evitar el famoso picoteo entre horas que seguro conoces. Por ejemplo, puedes comerlo con un par de tostadas, así como utilizar moldes en forma de flor, corazón, estrella…
A continuación todo cuanto nos puede aportar un huevo frito, a menos que lo consumamos con cocciones que adicionen grasas:
- Vitamina B
- Minerales
- Fósforo
- Proteínas
No obstante, hay que evitar comer huevos fritos a la hora de cenar, así como no es recomendable ingerir más de cuatro a la semana.